martes, 17 de noviembre de 2009

roque valenzuela. alcalde de la barca


diariodejerez.es

"Jerez no tiene ni para nóminas y deniegan nuestra segregación por causas económicas"
Tras el 'no' del Tribunal Superior de Justicia a la independencia, el alcalde socialista afirma que el Supremo es el próximo paso a dar "porque la segregación es la voluntad del 90% de los barqueños"

-¿Cómo se ha tomado la decisión del Tribunal Superior de Justicia de denegar la segregación a La Barca?

-Ha sido un palo para nosotros porque teníamos mucha confianza y entendíamos y seguimos entendiendo que cumplíamos todos los requisitos necesarios para convertirnos en municipio. Cuando uno lee la sentencia y ve los argumentos para el 'no', todavía nos sorprende más. Nosotros acatamos la sentencia, pero desde luego no estamos ni muchísimo menos de acuerdo con ella. Argumentan imposibilidad económica para prestar los servicios que hay que darles a los ciudadanos y en Andalucía hay más de 540 municipios menores que La Barca. Por lo tanto si nosotros no podemos, difícilmente podrían ellos cubrir ellos esos servicio y, sin embargo, los cubren. La realidad más evidente y palpable de que un pueblo es capaz de salir adelante y garantizar todo tipo de servicios lo tenemos en los tres pueblos cercanos que se han segregado: Benalup, El Cuervo y San José del Valle, y todos se han convertido en un grandes municipios. Además, hasta el momento no he oído a ningún vecino de El Valle quejarse de que ahora tengan menos servicios que antes.

-De nuevo han topado con la economía como motivo en contra de la independencia como pasó con la Junta .

-Creo que no era cuestión de echar muchos número sino de ver la realidad. Tenemos municipios grandísimos como Jerez con 200.000 habitantes y el mes pasado se las vieron y se las desearon para poder pagar las nóminas. Sé que el Ayuntamiento de Jerez lleva una crisis que no es achacable únicamente al gobierno actual, que se ha venido arrastrando desde hace muchísimo tiempo, pero lo que sí es cierto es que está en una situación económica catastrófica, horrorosa, por lo que demuestra que no se trata de que los servicios se puedan prestar dependiendo del número de habitantes que tengas, sino de la gestión que hagas. Si haces una buena gestión con el presupuesto que tú tengas seguramente podrás prestar todos los servicios adecuadamente y sin ningún tipo de problemas. Sin embargo si la gestión es mala no importa el número de habitantes que tengas.

-Desde el gobierno local aseguran que la situación en el Jerez rural ha cambiado mucho, ¿por qué insistir en la segregación?

-La conversión de las pedanías en Entidades Locales Autónomas (ELAs) no garantiza, ni muchísimo menos, el buen funcionamiento de ellas. Es cierto que se ha cambiado la actitud del Ayuntamiento de Jerez con respecto a las ELAs, pero bien sabe todo el mundo que precisamente La Barca y algunos pueblos más, como Torrecera y Estella del Marqués, hemos apostado por arrancar lo mínimo y responder un poco ante nuestros vecinos de esos servicios que había que garantizar y que Jerez no los estaba garantizando y sigue aún sin garantizarlos. Basta recordar la pelea que no hace mucho tuvimos que tener desde este Ayuntamiento para conseguir medios suficientes para poderle hacer frente a la factura de la luz. Días después de aquella movida, Pilar Sánchez vino a La Barca y prácticamente me puso de ladrón delante de todo mi pueblo, queriendo demostrar que con el dinero que nos daba sobraba por todos lados. Sin embargo, inmediatamente después se vio obligada a firmar un convenio conmigo y subirnos las transferencias en más de un 50 por ciento porque sabía que Roque Valenzuela tenía razón. Y, por supuesto, nosotros seguimos con el ánimo de colaboración que hemos tenido, porque aunque no estamos conforme con esa cantidad sí entendíamos que era una mejora importante. Hay una línea de descentralización general en España con la última Ley de Autonomía y tantas cosas que han ido cambiando precisamente porque la política de hoy lo que lleva es al acercamiento de los servicios al ciudadano y el poder gestionar de mejor forma por la cercanía todos los medios económicos y materiales que tenemos. No entiendo por qué con La Barca concretamente, que es exactamente lo mismo que queremos hacer, se nos vuelve en contra. Además, el espíritu de segregación que tiene La Barca no es una cosa única y exclusiva del alcalde sino que es de la gran mayoría de la gente. No es una cosa nueva, está muy arraigada, y ese espíritu va a seguir.

-La situación parece ahora más complicada tras el revés del TSJA.

-Hemos tenido tropezones con el Ayuntamiento que nos dijo que no, y no ha estado en consonancia con las promesas que se hicieron, porque había unas promesas por parte de Pilar Sánchez de que iba a apostar por la segregación de La Barca y eso es público y notorio en estos últimos años. Sin embargo, no ha sido así. Después, tropezamos con la Junta y ahora hemos vuelto a tropezar con el Tribunal. Pero eso no significa que no tengamos razón sino que se han dado una serie de circunstancias en el transcurso de este tiempo que quizá no hayan sido las más favorables para la segregación de La Barca. Estoy seguro, y así lo palpo en el ambiente y en los vecinos de La Barca, que en otras condiciones políticas seguramente ya habríamos estado segregados.

-¿Cuál es el próximo paso?

-El Supremo. No es la primera vez ni muchísimo menos que las segregaciones al final se han ganado en el Supremo. Vamos a valorar conjuntamente con toda la Comisión Pro Segregación y con todo el pueblo la nueva situación, pero personalmente apuesto por acudir al Supremo porque creo que el proyecto merece la pena. Creo que nuestro pueblo, nuestra gente, se lo merece porque cumplimos exactamente todos los requisitos, nos merecemos que nos respeten y que nos conviertan en el municipio 45 de la provincia.

-Llevar el tema al Supremo supondrá un alto coste económico, ¿puede permitírselo en estos momentos La Barca?

-Hay un coste, no cabe duda de que hay un coste económico, pero tenemos la suerte de que con las personas que estamos trabajando no son peseteros. Nosotros aportamos lo poco que podemos y cuando estemos segregados veremos si el coste ha sido alto o no ha sido alto. Entonces es cuando realmente seremos capaces de valorar si el coste ha sido el adecuado o no ha sido el adecuado. De todas maneras, pienso que conseguir la segregación, y no es que lo diga yo sino lo que dicen los ejemplos que están ahí de esos pueblos, que también tuvieron su coste, no les ha supuesto ningún dolor de cabeza. Todo lo contrario: le ha supuesto futuro, progreso, desarrollo, responder a las necesidades de su pueblo, muchos más habitantes... y esa es la realidad, esa es la realidad que queremos para nuestro pueblo, para La Barca. Todo lo demás, todo lo que digan de las limosnas que nos están dando, son milongas infundadas y yo creo que incluso más por razones particulares que por razones objetivas teniendo en cuenta solamente el bienestar de nuestra gente.

-Hay quien piensa que las pedanías son un lastre económico para el Ayuntamiento de Jerez, ¿qué opina?

-Si nosotros le costásemos a Jerez o le hubiésemos costado una sola vez una peseta, ya hacía tiempo que nos habrían echado del término municipal. No solamente a La Barca, sino cualquier otro pueblo, eso lo tenemos muy claro. Nosotros aportamos muchísimo Jerez de lo que ellos nos aportan a nosotros, por eso no quieren que nos segreguemos. Las cantidades no las sé exactamente pero, después de luchar muchísimo y estar arrastrándonos, en La Barca vamos a llegar a 1.200.000 euros en las transferencias y San José del Valle tiene de presupuesto 5 ó 6 millones de euros. La diferencia es grandísima aunque, por supuesto, hay que prestar más servicios y hay una cosa muy importante, hay que gestionarse mucho mejor.

-¿Qué coste tiene este tema para usted como alcalde?

-Desde el primer día que entré en el Ayuntamiento de La Barca como alcalde, uno de los proyectos que teníamos en nuestro programa electoral era la segregación. No hemos variado ni un ápice en ese aspecto a pesar de todos los cambios políticos que ha habido en el Ayuntamiento de Jerez. Por desgracia, desde Jerez no han sido capaces de respetar la voluntad del 90% del pueblo de La Barca sino que han pensando que lo mejor es reírse de ellos y mentirles. No cabe duda de que personalmente estoy pagando un precio como alcalde pero desde luego nadie en el pueblo me puede decir que los he engañado. Seguimos trabajando en la misma línea, seguimos con la intención de hacer un pueblo mejor. Cada cosa que hemos conseguido se las hemos arrancado a base de esfuerzo, de desgaste, de deterioro de relaciones, cuando lo fácil hubiese sido que nos hubiésemos sentado en varias ocasiones y haber dado soluciones a esos detalles porque esa era y sigue siendo nuestra voluntad.

-Habla de desgaste de relaciones, ¿cómo va el expediente que le abrió su partido tras los enfrentamientos con Pilar Sánchez?

-Tengo un expediente abierto en mi partido, pero lo máximo que pueden hacer es quitarme el carné. Sentiría mucho que eso fuera así, pero yo tengo un compromiso con mi pueblo y creo que es el primero que tengo que cumplir, que es defender los intereses de mi pueblo desde la perspectiva socialista que es la que a mí me llena, pero bueno estoy dispuesto a todo. Creo que el PSOE es un gran partido pero hasta los grandes partidos se equivocan. No sé cuando se resolverá el expediente pero tampoco es una cosa que me preocupe mucho. Simplemente me gustaría que esta tardanza que está teniendo sea porque al final yo pueda continuar y seguir defendiendo las listas del PSOE.

-¿Ha habido algún acercamiento entre los Ayuntamientos de La Barca y Jerez?

-No somos de los que nos gusta estar poniendo zancadillas, lo que pasa únicamente es que estos señores del Ayuntamiento de Jerez son incapaces de comprender cuál es la voluntad de los barqueños. Y si nosotros, por ejemplo, cuando peleamos e hicimos una huelga de hambre porque no teníamos policía estaba Pacheco, pues nosotros no podemos variar nuestra actitud porque sea Pilar Sánchez la que está, simplemente por eso, sino que vamos a cambiar nuestra actitud con respecto a la policía cuando tengamos policía. Lo hemos conseguido cuatro o cinco años después de las famosas promesas 'de que al día siguiente de entrar yo de alcaldesa, la policía está aquí'. Bueno, pues no fue así, ha sido tras muchos quebraderos de cabeza. Es una muestra de que no hay falta de voluntad por parte nuestra, sino más bien hay una falta de voluntad por parte de ellos y una chulería innata en la actitud de las personas que componen el Ayuntamiento de Jerez, que no son capaces de tener la humildad suficiente para sentarse con un alcalde legítimamente elegido e intentar comprender los problemas que se le van proponiendo para darle soluciones.

-¿Algún mensaje para los barqueños?

-Sabíamos cuando comenzamos el expediente de segregación que esto no iba a ser un camino de rosas, iba a ser un terreno pedregoso y dificultoso, pero no cabe duda de que la esperanza que tenemos es que el futuro que nos espera es mucho mejor para nosotros y nuestros hijos que las dificultades por las que estamos pasando. Esto solamente ha sido un revés y esa ilusión de convertirnos en un municipio que tan antigua es la tenemos que seguir soportando y llevando a cabo hasta que lo consigamos. No importa si tardamos un día, un año o diez años. Es una determinación que debemos tener clara e ir a por ella. Y, por supuesto, lo que sí tenemos que tener muy claro, y eso está en el día a día de los barqueños, es que no nos tenemos que dejar engañar. Nadie tiene que venir a contarnos más historias, nosotros sabemos perfectamente cómo le va a otros pueblos que se han segregado y esa es la única verdad que nosotros tenemos que creer: la realidad. Que nadie venga ya dándonos discursos fáciles y discursos cargados de mentiras, que ya lo que queremos son verdades y realidades.

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