viernes, 22 de enero de 2010

El alcalde de La Barca no descarta acudir a las elecciones con otro partido


lavozdigital.es

Valenzuela no cree que en el PSOE, del que fue expulsado durante 20 meses, lo readmitan, por lo que tendrá que estudiar otras opciones


El alcalde de La Barca, el díscolo socialista Roque Valenzuela, medita. Sus continuas críticas a la alcaldesa de Jerez -todo el mundo recuerda el espectáculo que ofrecieron ante los vecinos de la pedanía en una asamblea conjunta- le han costado la suspensión de la militancia durante 20 meses, como ya publicara este medio. Es evidente que Valenzuela, si opta a la reelección como alcalde pedáneo, no tendrá otro remedio que irse a otro barco. A no ser «que cambien de idea dentro del partido, algo que no creo que vayan a hacer».
Por su parte, él ya ha abandonado la idea de recurrir la decisión tomada por la dirección federal del PSOE, pues ya lo hizo en su momento, alegando las razones de su rebeldía, y no le sirvió de nada. Pero, de cara a las elecciones que tendrán lugar en un año y medio, no se da por vencido. El siguiente paso que tendrá que dar ahora, tras asumir el mazazo que ha supuesto la decisión del federal, será valorar si se presenta a la reelección o no. Algo que, por supuesto, no descarta.
«Estamos en ello, valorando la situación para ver si me presento o no, pero de momento no hay todavía una decisión», señaló el alcalde barqueño. Respecto a las perspectivas que se le abren, recuerda que en su día se le relacionó con una formación de reciente creación: Barqueños Unidos. Un partido que nació al amparo de la eterna lucha por la segregación de la pedanía, pero que «es totalmente privado, no tiene nada que ver con este alcalde», aseguró.
Posibilidades
Eso sí, reconoce que «la posibilidad está ahí». Aunque de momento «conmigo no se ha puesto en contacto nadie», afirmó.
«Ahora mismo todavía no me he planteado nada, todavía tendré tiempo de seguir estudiándolo y tomaré una decisión», remachó Roque Valenzuela. De algo sí está seguro: «No vamos -se refiere a él y su equipo- a permitir la discriminación caprichosa y seguiremos trabajando para que el Ayuntamiento de Jerez nos reconozca».
La diferente visión de las necesidades de los habitantes de La Barca, sobre todo en cuanto a la segregación y las transferencias, han motivado su enfrentamiento continuo con la alcaldesa y otros miembros del gobierno local.
No hay que olvidar que Valenzuela también llegó a pedir al partido que expulsara a Pilar Sánchez de sus filas. Algo que hizo después de la retirada de las pancartas en las que arremetía contra el gobierno municipal. «Que esta señora envíe una docena de efectivos policiales y bomberos a quitar una pancarta puesta por la pedanía, en la que reivindica soluciones a 20 días sin luz y teléfono en sus oficinas municipales, es grave», argumentaba entonces en su petición el alcalde de La Barca.

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